Esta, para mí, es una de esas películas que tiene mucho mejor recordación que experiencia. Digamos que en el cine lo pasé convenientemente bien, pero posteriormente, recordando la película y conversándola, la he encontrado mucho mejor de lo que originalmente pensé.
Lo primero, es que Once Upon a Time in Hollywood es una declaración de amor perpetuo e inmortal de Tarantino al cine y a Hollywood en específico. No es un amor ciego, porque reconoce faltas y vacíos, pero es amor incondicional al cabo. Tarantino ama lo que hace, y ama su Meca.
También es un trabajo maravilloso de reconstrucción de una época. Vestuario, diseño de interiores, peinados, colores, fotografía. El trabajo técnico de esta película es de los mejores que hemos visto en los últimos años, y se logran gracias a esa mano amorosa que dirige el espectáculo.
Lo segundo. Mi impresión (y solo mía no sean lateros) es que Tarantino pensó primero el final de la película y armó una historia larga y a veces compleja, con juegos de tiempo que pueden confundir (pero que en realidad si estás realmente atento no debería hacerlo), que lograra llegar a ese final específico que él quería. ¿Se hace un poco larga la película? puede hacerse larga, pero no tediosa que es lo importante.
Di Caprio, Pitt y Margot Robbie (que desde I Tonya se ha convertido en una de mis preferidas) están fantásticos en sus roles, y en general mi sensación que es que Tarantino logró que todos se contagiaran con su espíritu de Romeo enamorado del cine, sin importar lo pequeño de los papeles.
Once Upon a Time in Hollywood es una construcción de tiempo, de cariño y muy bien planificada. Decir que no se trata de "nada" como he leído y escuchado por ahí, es francamente irse por el camino fácil cabros... francamente.
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