Downton Abbey. Temporada 6, Episodio 8.

Queridos Lords and Ladies. Vaya la (casi) última advertencia de estas entradas de Downton Abbey. A continuación encontrarán spoilers del ÚLTIMO episodio en temporada regular de Downton Abbey. Ya sabrán ustedes que hacer.

Tuvimos que esperar toda una temporada (y tal vez bastante más) para que Julian Fellowes se acordara que es el dueño de un Oscar a mejor guionista, y que, además, tiene un BAFTA y un Emmy (por Downton Abbey, dicho sea de paso). Porque sabemos que esta última temporada, a pesar de la expectación y de la nostalgia anticipada que nos produce por ser la última, ha requerido de bastante de nuestra paciencia. No voy a decir que ha sido una mala temporada (nunca leerán eso de mí, no señor), pero ha sido... Inestable. Con muchos altos y bajos...

HASTA EL EPISODIO 8.

El final de temporada fue un episodio PERFECTO. PER-FEC-TO. Desde una perspectiva Downtoniana. El tema con Downton Abbey, es que en el universo de las series (universo que, tal como su contra parte física se está expandiendo hasta el infinito y más allá) y al ser medida con la misma vara y los mismos criterios de otras series, puede no ser demasiado buena, en el sentido que, como hemos dicho muchas veces, tiene saltos de guión absolutamente inverosímiles (por no decir ridículos), y crea historias para después desecharlas sin mucha explicación.

Pero el tema es que el trato que hicimos con Downton, no es el mismo que hacemos con las otras series que vemos. Ofrecimos nuestra fidelidad, como con otras, cierto, pero Downton no nos ofreció exactamente el mismo tipo de calidad que ofrecieron otras series como Mad Men, Breaking Bad o Game of Thrones, por decir algo, sino que se limitó a ofrecernos 3 cosas: Belleza escénica, buenas actuaciones y mucho, mucho, mucho MELODRAMA. Downton no ofreció la tensión dramática fantástica Homeland, por ejemplo, ni la delicadeza de Transparent, ofreció, sin miramientos, clavarnos un puñal y que, en lugar de sangrar, viéramos la serie.

Y por primera vez en esta temporada cumplió a cabalidad su parte del trato (y creo que en parte tiene que ver con que el episodio fue más largo y por lo tanto las escenas fueron más largas). Downton siempre nos ha dado belleza. Probablemente esta sea la serie técnicamente más hermosa que he visto en la última década (vestuarios, escenarios, música, peinados y una larga lista de etcéteras impecables), y no me atrevería a negar la habilidad actoral de leyendas británicas como Maggie Smith o Penélope Wilton, de actores consagrados como Hugh Bonneville o Jim Carter, ni de frescos rostros nuevos como Laura Carmichael y sobre todo, sobre todo de Michelle Dockery.

La deuda de Downton, aquella que en esta temporada se nos estaba debiendo con creces (con notables excepciones) fue la del Melodrama. Deuda que fue saldada a la perfección con el último episodio, porque en la escena del desayuno donde Mary en su mejor personificación de The Ice Queen obliga a Edith a decirle al bueno de Bertie que Marigold es su hija, di un grito (lo prometo), porque en la escena donde las hermanas por fin se enfrentan de un modo que habíamos estado esperando desde la temporada uno me encogí en el asiento, porque me emocioné lo indecible cuando a Violet le tiembla la voz al decir que ella cree en el amor, y porque se me apretó la garganta cuando Mary va a la tumba de Matthew a confesarle que había vuelto a enamorarse e Isobel le da su bendición para casarse otra vez.

Y el ingrediente común de todas estas escenas y de varias otras es, como ya dijimos en alguna otra entrada, es Lady Mary Crawley (y no tengo palabras suficientes para hacerles saber lo excelente que estuvo Michelle Dockery en este último episodio. Si después de esta serie ella no se convierte en una estrella, será únicamente porque ella no lo quiso. No hay otra explicación). Cuando Lady Mary sufre, todo el mundo debe sufrir con ella. Tal como dijo Edith (que probablemente sea la persona que mejor la entiende) cuando Mary es infeliz hará lo que sea para lograr que el resto caiga con ella. Arrastró a la miseria a Edith, a Bertie, a Henry, a Branson y  hasta a Robert (si fue un golpe bajo lo que le dijo de Thomas). Y si hubiera podido se habría llevado a todo el pueblo con ella. En ese sentido, Mary Crawley sería un villano fabuloso si este hubiera sido otro tipo de serie.

Pero cuando Mary deja de sangrar, y se derrite su corazón de hielo (cosa que en este episodio ocurrió en la maravillosa conversación con Violet) es capaz de aceptar sus errores, ofrecer disculpas por ellos y de actos de nobleza realmente desinteresada como haber llevado a George a ver a Thomas luego de su intento de suicidio. Y este es un punto interesante porque el hecho de que en toda la casa Mary sea la única que logró (desde antes de este episodio) entender y preocuparse por la desesperación de Thomas, muestra que hay puntos profundos en los que algunos personajes se conectan porque simplemente son distintos a otros. Es bien curioso que en la temporada 1 Mary se describe a sí misma como “un alma perdida” (“I’m a lost soul”), luego del incidente con Mr Pamuk, y en la misma temporada Mrs Patmore describe a Thomas de la misma manera cuando Daisy andaba enamorada de él (“He is a lost soul, Daisy”). Y aunque no creo que sean precisamente almas perdidas, si podríamos definirlos como “almas atribuladas”. Por los motivos que sean, ambos tienen dificultades para ser felices y, al contrario de otros en donde el destino parece jugarles constantemente malas pasadas (Si, en ustedes pensamos Edith, Anna y Bates) en el caso de Thomas y Mary, pero sobre todo de Mary, gran parte de sus dificultades son un boicot de ella contra sí misma.

Puede que esto sea lo último que veamos de ella de forma tan cruda ya que imagino que de aquí en adelante por fin estará feliz con Henry y George. Tengo la impresión de que el especial de Navidad atará cabos sueltos y nos dejará despedirnos de Downton con una sonrisa y toda la nostalgia del mundo sin hacer muchos más conflictos. Por eso, antes de que la entrada del último episodio EVER se convierta probablemente en un remolino de emociones asociadas a muchos personajes, solo me resta decir. Buen viaje Queen Mary. Have a Happy life. Finally.

Todo lo demás y bla bla bla.

-Solo para salir del tema, yo sé que lo apresurado del matrimonio de Mary con Henry fue WTF. De hecho como que me reí. También les puedo decir que para mí no es del todo convincente como se cierra el drama, pero a estas alturas ¿Qué importa? De alguna forma me alegra que este conflicto no haya quedado por resolverse para el especial de Navidad porque para este ya tenemos muchos pendientes. Y ¿Cómo saben? A lo mejor sin el conflicto de por medio, la pareja de Henry y Mary por fin logran ser adorables juntos. Nunca se sabe.

-Estoy 99% segura que en algún momento del tornado de emociones del último episodio dije en voz alta “¡¡Hasta cuando sufre la pobre Edith!!” Estaba dispuesta a iniciar una cruzada santa a su favor, pero después entendí que todo el drama (Oh Dios mío cuanto drama) sin duda que tendrá un final feliz. SIN DUDA. Edith, claramente, es muy distinta a quien fue en las primeras temporadas, sin embargo, todos nos acordamos de cómo era. Y ella lo recuerda también y creo que por eso fue la que tendió la rama de olivo al asistir al matrimonio de Mary. Cierto que Mary le arruinó el romance con Bertie, pero no es menos cierto que Edith fue la culpable de que todo el lío del turco que persiguió a Mary por dos temporadas (no el lío en sí, sino que la posibilidad de que esto se supiera). Y supongo que entendió que es tiempo de dejar de pelear. Nunca fue más cierta la frase de que “uno no elige a la familia” y lo cierto es que este par nunca ha logrado llevarse bien. Espero que después de que explotara el volcán logren al menos vivir en paz… pero por sobre todo espero que Bertie vuelva por Edith. Si no esto será la guerra.

-¿Les da a ustedes la impresión de que la relación de Mary y Edith es probablemente una repetición de cómo fue la relación de Robert y Rosamund? Porque está claro que este par nunca se ha llevado la mar de bien. No digo que no se quieran, porque hay cosas que ahora soy incapaz de apuntar con exactitud que da a entender que el cariño está presente, pero claramente el camino a la relación actual, que a veces es bastante áspera aunque cordial, fue uno lleno de baches. Es como si ambos ya aceptaron que está bien que a veces el otro sea un poco rudo y hasta maleducado y entrometido, aceptan que es una forma de amor e interés aunque no les agrade la forma en que este amor se expresa. No siempre. Solo podemos esperar (en nuestra imaginación, obvio) que en el futuro Edith y Mary al menos alcancen este tipo de entendimiento.

-Qué gran personaje es Violet. Sé que lo he repetido hasta el hartazgo pero es que ¿cómo no hacerlo? La escena de Violet y Mary fue maravillosa, tanto por cómo se gestó por como la desarrollaron las actrices. Branson reconoce que no tiene la fuerza ni la capacidad de enfrentarse a Mary, porque en el fondo no la entiende. La quiere pero no la entiende (y quedó claro en las peleas que tuvieron y en la NULA delicadeza con la que Branson intentó meter a Henry en la casa. En serio Tom, el tino no es lo tuyo por más bien intencionado que seas). Lo bueno es que tuvo el suficiente sentido común para saber que el único par de Mary tanto en carácter como en complejidad es su abuela, y tuvo el buen tino de llamarla. Y con Violet presente Mary por fin sintió que podía confesar cual era el real problema con Henry, y que no era precisamente que no estuviera a “su altura” (aunque conociéndola probablemente algo de eso había). La aterra perderlo en un accidente de auto, y solo Violet le pudo asegurar que está bien arriesgarse una segunda vez. Aplausos para ambas.

-No sé bien que decir del té que compartieron Isobel y la pesada que se va a casar con Larry. La cosa es que creo que este es un conflicto que se va a resolver para bien o para mal en el especial de navidad. No tiene caso diseccionarlo ahora.

-Confieso que entre tanto drama, me reí bastante con el dilema de Mrs Patmore. Lo mejor es que nosotros, el público, fuimos parte de la broma que se compartía en toda la casa. Me reí cuando Anna y Mary se rieron, me reí cuando Los Bates se rieron, me reí cuando los de arriba se rieron. Era como una broma común a todos nosotros. Además me gustó la resolución porque a lo largo de la serie se ha notado que hay una química bien especial entre Mrs Patmore y Robert, que no tiene una explicación muy razonable (ni verídica para la época probablemente) pero ahí está. Y es adorable.

-El lío de Thomas es uno de los puntos bajos de este episodio, no por el desarrollo sino que, como tantas veces, por la resolución. ¿No les pareció que hubo poco drama cuando lo encontraron en la tina? Como que no lo sacaban nunca del agua, se mantuvo bien en secreto… no sé. Algo me faltó ahí. Puntos altos, como dije, fue cuando lo fueron a ver Mary y George y supongo que también es aceptable la excusa que por eso ahora no lo echarán. También me gustó que Carson tuviera la decencia de sentirse culpable.

-Y hablando de Carson. Claramente esta no ha sido su mejor temporada, pero como ya lo queremos desde antes y como es el marido de Mrs Hughes, vamos a perdonarlo. ¿Les parece?

-De los Bates no hay mucho que decir excepto que son felices y esperamos que se mantengan así. Creo que John Bates ha sido extra sub utilizado esta temporada, pero estoy dispuesta a aceptarlo sin chistar. Un Bates feliz es un Bates ausente. Un Bates presente solo significa problemas.

-Me anduve emocionando con Mr Molesley. ¿Significa esto que se va de Downton? Si es así entonces es más que razonable que Thomas se quede. Espero, por otra parte, que se case con Baxter. De hecho espero que todos los que puedan casarse terminen haciéndolo en el especial de navidad (incluso Daisy y Will y Mrs Patmore y Mr Mason) porque ¿qué sentido tiene un melodrama del tipo de Downton si al final no terminan todos muertos o casados? ¿Ah?

-¡BANANAS!. Gracias Sprat por los buenos momentos

Pensamientos Random.

-Ahora solo nos queda esperar el ÚLTIMO (snif) episodio de Downton Abbey Ever. No sé qué será de mi vida después, pero por lo pronto, por este mes y medio que queda, voy a aferrarme a lo que pueda.

-Hay tantas y maravillosas frases fantásticas en este episodio donde el guión realmente está muy bueno, que no tiene sentido que las ponga todas porque si no estaré transcribiendo prácticamente todo. Yo que ustedes veo el episodio otra vez. Es lo que haré yo sin duda.

-El episodio fue notoriamente más largo (creo que en televisión fueron 90 minutos con comerciales) No me estoy quejando.

-La función de títeres de Branson y Bertie fue como una versión eduardiana de Rambo o algo así. Mucho golpe

Nos vemos en Navidad…. Cuando nos demos un abrazo de grupo y comencemos el duelo por Downton. Hasta entonces, creo que veré toda la serie otra vez.