45 years es una genialidad por varios motivos. El primero de ellos es por ser capaz de mostrar la vida, sin muchos aderezos, y hacerlo de manera conmovedora. Más aún, 45 years toma como asunto la vida romántica avanzada... esa que ya está formada y consolidada, y no la que recién empieza que es lo que usualmente muestra el cine.
Pero más allá de eso, entre los grandes méritos de 45 years, está que puede mostrar una realidad que, al menos para el mundo occidental suele pintarse como terrible, pero que ocurre de manera normal y no es para nada el fin del mundo, y es el hecho de que un mismo corazón (llamemoslo así aunque sepamos que el corazón es en realidad solo un órgano) puede albergar dos grandes amores, sin que uno pisotee al otro, y que, en realidad, la vida está hecha de decisiones y azares, principalemente, y no necesariamente de grandes pasiones.
También muestra que el amor, por mucho tiempo que tenga y por muy verdadero que sea, tiene sobresaltos y se pone a prueba. Porque básicamente así es la cosa, y que cada momento cuenta en una relación.
Charlotte Rampling y Tom Courtenay, entendieron perfectamente la idea de la película (que, a momentos, solo a momentos, se hace como DEMASIADO obvia... solo por quejarme de algo) y se perdieron en sus personajes. Rampling con sutilezas nivel OMG y Courtenay, por el contrario, tomando el rol del que no sabe esconder mucho lo que siente.... hasta que, al final, Rampling deja que se rompa la máscara en algo que no es nada menos que una maravilla.
Estuve tentada de decir que no es una película para todo público porque no es "entretenida" en el sentido convencional de la palabra, pero hey! la vida tampoco es entretenida en todos sus momentos y ahí la siguen viviendo. Y no deja de ser apasionante. Además tiene la perfecta duración de una hora y media.
En lo posible, si la ven, háganlo acompañados porque es de esas películas que GRITA una conversación posterior.
Eso
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