En general se sabe como son las películas basadas en novelas de John Le Carré. Hay harta intriga y espionaje involucrado, una buena dosis de ambigüedad, pero lo que no hay es acción Bondiana. O sea, aunque si hay eventuales disparos y uno que otro golpe, no hay nada de eso que ha hecho a James Bond tan amado sobre todo por el publico masculino.
Las películas basadas en novelas de John Le Carré tienen más que ver con juegos mentales y estrategias que con acción. De hecho muchas veces da la sensación de que la cosa ni siquiera avanza, aunque lo está haciendo ahí frente a nuestras narices. Supongo que la mejor representación de esto que les acabo de decir es la fabulosa Tinker Taylor Soldier Spy, sin embargo Our Kind of Traitor también tiene bastante de esto aunque no alcanza lo bueno de la otra que les mencioné.
Aún así es bastante agradable, está bien filmada, mantiene una muy buena dosis de tensión y tiene actuaciones más que aceptables. Si encuentro problemáticos algunos giros de guión, que imagino vienen así desde el libro.
Our Kind of Traitor, en cierto modo, muestra a héroes por accidente, y otros hechos por las circunstancias. Sin embargo, algunas partes y algunas premisas se desarrollan de manera tan abrupta, tan sin razón (a pesar de que en los momentos finales de la película se intentan responder pero no muy bien) que es difícil creer en lo que está pasando (lo logras si dejas de pensar en los por qué y simplemente te fijas en los qué)
De todos modos se disfruta bastante bien, y creo que eso es un mérito. Sobre todo en un año en que nos hemos visto bombardeados de super héroes y taquillas reventadas con sobre dosis de acción, una película de estas características termina siendo como tomar agua fresca después de comer mucha azúcar.
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