jueves, 1 de marzo de 2012

Mitos de viajes: New York

No es ni contar el viaje que acabo de hacer (baste decir con que lo pasé muy bien) ni mucho menos hacer una guía de la ciudad. Diez días no bastan para poder hacerse realmente conocedor (más allá de que caminé más que Kung Fu)

La idea es, de manera básica, confirmar o negar ciertos mitos que giran en torno a la ciudad de New York, por cierto desde la perspectiva de esta servidora, y con lo poco que te pueden dar 10 días  (muchos post atrás hice lo mismo con un viaje a Europa, en caso que a alguien le interese leer leseras).

Acá vamos:
1.- El aeropuerto JFK es como una mini Gestapo y todos te miran feo: FALSO. De hecho es un lugar bastante agradable, y la gente es agradable. Todo es agradable (hasta la temperatura del aire acondicionado lo cual, sabe Dios,  es muy difícil de lograr). Te explican todo muy bien, y si eres de esos que a pesar de todas las explicaciones no entendiste (hay gente que francamente no sabes si son tontos o se niegan a intentar entender) tampoco te hacen un tremendo escándalo. Te demoras lo esperable y te preguntan lo lógico. Que te revisan, lo hacen. Sobre todo cuando te vas (es decir pretendes subirte a un avión) pueden ponerse incluso un poco pesados (tienen esa máquina insoportable que hace que toda fila se haga lenta) pero son las reglas del juego y dentro de todo el trato es bien cordial.

2.- No es más que una selva de cemento: VERDADERO. El problema es que la frase parece despectiva y probablemente así quieren que suene los que no gustan de la ciudad en cuestión, pero no debería serlo. New York probablemente sea una de las ciudades en que más acierta uno al imaginarla sin haberla conocido, por lo tanto al verla, no hay sorpresas. Por cierto que puede tener que ver con la cantidad de películas realizadas en N.Y que han dejado poco a la imaginación, pero por otra parte también hay muchas películas filmadas en Londres y París, y en mi opinión si son ciudades sorprendentes. Pero volviendo a la frase principal, New York (con la notable excepción del Central Park que es un gran pulmón) no es más, pero tampoco menos, que una selva de cemento (y ya sabrán disculparme lo cursi/hip hopero de la frase que se es más bien detestable). Así como en el Amazonas hay lugares donde los árboles no dejan pasar la luz del sol, en New York hay lugares en que los edificios son tantos y tan altos que es imposible verlos iluminados a menos que utilices luz artificial. No es ni lindo ni feo, es no más. Y si uno quiere conocer una ciudad moderna propiamente tal probablemente esta sea LA ciudad que hay que conocer, salvando las distancias con aquellas de oriente que todos sabemos cuáles son.

3.- No conviene arrendar auto: VERDADERO. Ojo que básicamente me refiero a Manhattan y no a todo New York, dado que es la zona más visitada. El metro es muy fácil de usar, no es caro, la ciudad es muy simple de caminar también (es básicamente un tablero de ajedrez) y las zonas realmente turísticas son todas de distancias caminables. Desde el punto de vista del automovilista, hay taco casi siempre para uno u otro lado, y los estacionamientos tienen precios estratosféricos (del tipo media hora por 10 dólares). Personalmente soy de las que, sobre todo si hablamos de turismo, prefiere caminar a andar en auto, a menos que sean ciudades con pocas veredas (a ustedes les hablo Miami y Orlando), pero siempre encuentras gente que prefiere la comodidad del automóvil. En este caso más que un avance es un retroceso, y en el peor de los casos, si algo abunda en N.Y son los taxis.


4.- Puedes comer lo que se te ocurra: VERDADERO. Para estas alturas cualquiera que pase por acá ya habrá notado que la comida es un ítem de suma importancia en mi vida, y me alegra decir que aunque N.Y, así como Londres, no son ciudades que puedan ofrecer una gran variedad de platos representativos del país al que pertenecen porque dicho país no tiene una gastronomía la mar de deliciosa y típica (para el caso de USA la comida nacional debe ser o la hamburguesa o el hot dog en su forma más fome que es el pan con la pura salchicha y una rayita de mostaza) pueden ofrecer comidas de todo el mundo. Tailandesa, brasileña, italiana, india, china, árabe, etc ,etc. Por lo tanto te puedes dar de una buena vez varios gustos. Glotones del mundo, esta es una de vuestras ciudades.

Bonus: Relacionado con el punto anterior. Chinatown es como sacar un pedazo de China y ponerlo en occidente: Verdadero. ¡Tanto chino! Para partir aclarar que la población de asiáticos (no necesariamente chinos) ya sea inmigrantes o nacidos en USA es realmente impresionante. A este paso en poco van a superar a los latinos. No sé cómo está la cosa en otros estados, pero al menos en N.Y de 10 personas al menos 4 (y hasta 7) son asiáticos o algún derivado. Chinatown no es, como en otras partes, lugares turísticos manejados por chinos, sino que es el lugar donde se asentaron los chinos y la gente va a turistear allá. Todo está en chino, el McDonalds, el metro, todo. Y hay más restaurantes chinos que semáforos. Y muy baratos. Al lado está Little Italy, que cada día es más chico porque los chinos son cada vez más y se van expandiendo. Ya sabemos todos la velocidad pavorosa con que parecen poder reproducirse.

Y eso sería.

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