domingo, 10 de enero de 2016

Película 9/250: Youth

9/259: Youth

Youth es una declaración de principios de Paolo Sorrentino, y probablemente por eso me gustó tanto. Puedo pensar en varias cosas que no me gustaron (de partida, como siempre, siento que le sobran 20 minutos), pero lo cierto, es que me gustó porque es una película bien honesta, o al menos a mi se me hizo así.

Es bellísima estéticamente hablando, lo que a estas alturas ya no debería ser una sorpresa porque es un asunto que a Sorrentino no solo le interesa, si no que además explota. Sobre todo la relación entre cuadro (estética visual) y música, en esta película es una belleza. Un tesoro. ¿Que a veces abusa de la estética? Puede ser, sobre todo si el público no tiene paciencia... aunque no me imagino a una persona sin paciencia viendo a Sorrentino para empezar.

Además está actuada de manera bellísima. Bellísima y a ratos totalmente conmovedora (los últimos 20 minutos son una montaña rusa de emociones. No está de más recomendar pañuelos si alguien es dado a la lágrima fácil). Una se puede imaginar por qué tipos como Michael Caine, Harvey Keitel o Rachel Weisz dicen que si a estos proyectos alejados del puño de Hollywood.

Pero aparte de lo anterior, de lo hermosa, de las buenas actuaciones y la muy buena música, lo que más me gustó de Youth, como dije al pricipio, es la declaración sin vergüenza ni ambivalencias, de ciertos principios que, asumo yo, son los de Sorrentino. Principios que si bien a veces se dejan a interpretación de alguna escena,  muchas veces son expuestos de manera explícita en el diálogo, como por ejemplo que la edad es más una actitud de vida que un número de años, que nadie nace sabiendo como ser padre (o cualquier otro rol importante) y finalmente, el que más me gustó, que si bien las promesas son importantes hay veces que para poder ser feliz, para hacer algo bueno, es necesario romperlas. Y está bien hacerlo.

He visto varias críticas en donde se compara Youth al trabajo de Fellini, y creo que estoy de acuerdo. Pero, al contrario de otros que creen que Sorrentino está emulando o copiando a Fellini, yo creo que más bien lo tributa. Que no es exactamente lo mismo.

PS: Ojo con la canción que abre la película. Es LO pegajosa. De hecho ahora la estoy tarareando... En serio

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