Burning
Que buena película es Burning. Por ahí leí a a alguien decir que es muy lenta, y aunque no creo que existan las películas lentas, si creo que hay algunas que entregan demasiada información, y por lo tanto se toman su tiempo para llegar al meollo de la historia que quieren contar.
Burning es de esas películas. Entrega mucha, pero mucha información en la primera hora y media, y luego desarrolla un drama en la hora que sigue. La cosa es que ninguna de la información que entrega sobra, lo cual es increíble. Toda la información sirve para que al final puedas hacerte una idea de qué es lo que pasó, que puede ser totalmente distinto a lo que otro cree que pasó. Y eso lo hace una película fantástica.
En términos simples trata de un chico (sorry soy incapaz de retener nombres coreanos), que quiere ser escritor, y que se reencuentra con una amiga de la niñez, con quien tiene algo parecido a un romance, y luego ella le pide que le cuide a su gato mientras se va a África por un mes. Al regresar de África, ella lo hace acompañada de un nuevo amigo, un chico millonario, y que siempre da la sensación de estar ocultando algo.
Como ya me ha pasado otras veces, sobre todo con el cine coreano, es difícil decir el género de esta película, y de pronto hay que dejar de intentarlo. Es una gran película con drama, romance, alta poesía, un thriller, con suspenso y muchas incógnitas por resolver. Muy bien filmada, actuada, y una fotografía hermosa que, al contrario de muchas otras, es un actor más de la película.
Que gran cosa es el cine coreano... gran cosa.
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