Películas 2019. Dolemite is my name

Dolemite is my name

Vi esta película porque la verdad no podía creer que Eddie Murphy aún existe. Eddie Murphy es de esos casos muy curiosos, en donde un artista está realmente en la cresta de la ola, es EL actor de un rubro con el que todos quieren trabajar, y de pronto, una mala decisión y PAF, todo a la basura. Aunque en realidad, con toda honestidad, el caso de Eddie fue un grupo de malas decisiones que incluyeron esa horrorosa película donde hace de vampiro (jajaja) y The Haunted Mansion que pudo ser un Blockbuster tipo Piratas del Caribe pero no pudo ser porque la hicieron mal

Como sea, Eddie Murphy, a pesar de sus malas decisiones, a lo largo de su carrera ha demostrado un gran talento para la comedia, sobre todo cuando ésta no se basa en morisquetas y es acompañada de un buen guión, como es el presente caso.

Dolemite is my name  trata de de un tipo, comediante de Stand Up de los 70, que sueña con ser una estrella y para eso necesita de un golpe de suerte y algo fuera de serie... lo cual logra inventando a Dolomite, que es un proxeneta que habla básicamente solo vulgaridades (de manera graciosa) y se rodea de personajes que no son los llamados a los cuadros de honor en los colegios (que no es necesariamente malo)

La cosa es que, más allá del exceso de garabatos, palabrotas, etc que la película soporta de buena manera, My Name is Dolomite tiene cosas bien interesantes, más allá de la comedia, como fenómeno de masas. No siempre lo que le gusta a la crítica le gusta al común de la gente. Ven cosas distintas.

La segunda cosa interesante, es la proposición sin ningún aspaviento, de que el humor negro es distinto al blanco. Y punto. No necesariamente hay uno mejor, simplemente, al menos en USA, les dan risa cosas distintas, y los inteligentes saben explotar eso.

Un muy buen ejercicio es Dolomite